Al nacer, hay presentes muchos reflejos innatos en el bebé. Uno de ellos es el llamado reflejo gastrocólico, que consiste en que al llegar la leche al estómago, se estimulan los movimientos intestinales y hacen caca. Suele estar presente las primeras semanas, por lo que es completamente normal que los niños hagan numerosas deposiciones. No todas ellas son abundantes, ya que los padres notarán que muchas son “peditos pintores”, manchando poco el pañal. Por tanto, si somos esos padres que nada más manchar el pañal lo cambiamos; puede ser que durante una toma tengamos que hacerlo 2 ó 3 veces.